Interpretación de la Biblia / Efesios 1:17

En Efesios 1:17, el apóstol Pablo escribe a los cristianos de Éfeso pidiéndole a Dios que les dé “el Espíritu de sabiduría y de revelación, para que lo conozcan mejor”. Esta petición es una expresión de su profundo deseo de que los cristianos de Éfeso crezcan en el conocimiento de Dios.

Para entender mejor este versículo, es importante prestar atención a las palabras que usa Pablo. En primer lugar, habla del “el Dios de nuestro Señor Jesucristo”. Esta es una declaración de la relación que existe entre Dios y Jesucristo. Jesús es el Hijo de Dios y estaba en perfecta comunión con Su Padre Celestial. En segundo lugar, el apóstol llama a Dios “el Padre glorioso”. Esta expresión enfatiza el carácter divino de Dios y Su grandeza.

La sabiduría y la revelación son dos cosas diferentes. La sabiduría es la capacidad de aplicar el conocimiento de manera efectiva. La revelación, por otro lado, es el acto de mostrar o revelar algo que no se entendía o conocía previamente. Por eso el apóstol pide que Dios les permita aplicar sabiduría en su conocimiento de Él, y también que les revele nuevas verdades acerca de Su carácter y Su voluntad.

En la vida cristiana, conocer a Dios es extremadamente importante. Es importante no sólo entender lo que Dios quiere de nosotros, sino también tener una relación más profunda con Él. Conocer a Dios profundamente nos ayuda a confiar más plenamente en Él y a ser más fieles en nuestra obediencia a Él.

El llamado de Pablo a los cristianos de Éfeso no se aplica sólo a ellos, sino a todos los cristianos. Debemos desear “el Espíritu de sabiduría y de revelación, para que lo conozcan mejor” en nuestras propias vidas. Esto significa que debemos ser humildes y estar dispuestos a aprender de Dios.

También debemos recordar que conocer a Dios no es un fin en sí mismo. Como cristianos, debemos procurar conocerlo mejor para poder servirle mejor. Conocer a Dios debe llevarnos a una vida de amor y servicio a los demás.