Interpretación de la Biblia / Juan 7:16
Mi enseñanza no es mía —replicó Jesús—, sino del que me envió.
Juan 7:16 es un versículo bíblico que nos habla de la autoridad y el origen de la enseñanza de Jesús. En este pasaje, Jesús se dirige a los fariseos y explica que la enseñanza que Él enseña no viene de Él mismo, sino de Aquel que lo envió.
Este versículo es importante porque nos muestra que la enseñanza de Jesús tenía una fuente divina y no era simplemente fruto de Su propia sabiduría, en el momento en que los fariseos vieron a un hombre ante ellos con sus propios ojos. Al atribuir su enseñanza a Dios, Jesús nos muestra que Su mensaje es verdadero y tiene autoridad divina.
Libro: Nuevo Testamento /
Juan