Interpretación de la Biblia / Eclesiastés 4:4
Vi además que tanto el afán como el éxito en la vida despiertan envidias. Y también esto es absurdo; ¡es correr tras el viento!
Este versículo nos invita a reflexionar sobre nuestros sentimientos hacia los demás y a ser conscientes de que la envidia sólo nos lleva a la vanidad y la aflicción de espíritu. Debemos aprender a valorar nuestras propias capacidades y logros, sin compararnos constantemente con los demás.
Además, este versículo nos llama a ser compasivos con quienes nos rodean y a no envidiar sus éxitos y logros. Debemos estar felices por la felicidad y éxito de los demás, y apoyarnos mutuamente en nuestros proyectos y sueños. De esta manera, podemos construir una sociedad más justa, armoniosa y equitativa.
Libro: Antiguo Testamento /
Eclesiastés