Interpretación de la Biblia / 1 Juan 4:2-3
1 Juan 4:2-3 estos son los versículos bíblicos que nos habla de la importancia de discernir espíritus y nos da una idea muy clara de cómo hacerlo. Este es un punto importante porque estos versículos nos están llamando a hacer algo: conocer el Espíritu de Dios.
Y esto es importante porque para los cristianos, nuestra relación con Dios es central en nuestras vidas. Así, conocer el Espíritu de Dios nos ayuda a tener una relación más profunda y significativa con nuestro Creador.
¿Qué significa confesar que Jesucristo vino en carne?
En pocas palabras, esto significa que creemos que Jesucristo es Dios hecho hombre. Es decir, creemos que el Hijo de Dios se hizo carne y habitó entre nosotros, como se describe en Juan 1:14.
¿Quiénes son los anticristos?
El apóstol Juan advierte en sus cartas sobre una serie de personas conocidas como “anticristos”. Éstos son aquellos que niegan que Jesucristo es el Hijo de Dios y el Salvador del mundo, es decir, aquellos que se oponen a la obra redentora del Señor.
Los versículos 1 Juan 4:2-3 enfatizan la importancia de reconocer que Jesucristo vino en carne y estuvo en nuestro mundo. Esta es una confesión muy importante para todos los cristianos, porque aquellos que no la hacen están bajo el poder del espíritu del anticristo.
El espíritu del anticristo
El espíritu del anticristo es aquel que se opone a Dios. Esta fuerza sobrenatural busca reemplazar el plan divino con una mentira, una ilusión carente de vida eterna. Es su naturaleza ser autor de mentiras, por ello trata de distanciarnos de la verdadera fe y de la verdad revelada por Dios.
1 Juan 4:3 enfatiza que todo “espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios”. Esta frase puede parecer algo críptica, pero su significado es claro: aquellos que no reconocen la humanidad y divinidad del Señor Jesús están bajo el poder del espíritu del anticristo.