Interpretación de la Biblia / 1 Corintios 15:56
Este versículo es parte del capítulo 15 de la primera carta de Pablo a los Corintios. En esta carta, Pablo escribe sobre la resurrección de Cristo y su significado para los creyentes. En el versículo anterior, Pablo afirma que “el pecado es causa de muerte”. En este versículo explica cómo el pecado tiene poder a través de la Ley.
El aguijón de la muerte
El término "aguijón de la muerte" refleja la idea de que la muerte tiene una fuerza dolorosa que se asocia con la sensación de un aguijón o una espina que atraviesa a una persona. En la cultura judía, la muerte era vista como un castigo por el pecado, como resultado de la desobediencia a Dios en el Edén (Génesis 2:17). Así, Pablo alude al hecho de que la muerte tiene poder sobre la humanidad a causa del pecado original.
El poder del pecado
Pablo también enfatiza el poder del pecado a través de la Ley. La Ley se refiere a los mandamientos que Dios le dio a Moisés en el Antiguo Testamento (Éxodo 20:1-17). Estos mandamientos incluyen prohibiciones como "No matarás" y "No cometerás adulterio". Así, la Ley define lo que está bien y lo que está mal, y cuando una persona no guarda la Ley, peca.
Sin embargo, el problema es que la Ley no es capaz de salvar al hombre del pecado. Por el contrario, guardar la Ley puede conducir al orgullo y a la arrogancia, que abren el camino a más pecado. En otras palabras, el poder del pecado reside en su capacidad de hacer que una persona se sienta justa y, por lo tanto, no vea la necesidad de arrepentirse y recibir la gracia de Dios.