Interpretación de la Biblia / Hechos 1:8
Hechos 1:8 nos habla del poder del Espíritu Santo y que nosotros como creyentes debemos ser testigos de Jesús en todas partes.
Recibiendo el poder del Espíritu Santo
El versículo 8 comienza con las palabras: "Pero, cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder". Aquí el autor nos muestra que para ser testigos de Jesús, primero necesitamos recibir el poder del Espíritu Santo. El poder del Espíritu Santo nos ayuda a comprender mejor la Palabra de Dios y actuar según Su voluntad en nuestras vidas.
Recibir el poder del Espíritu Santo es un regalo que recibimos cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador personal. El Espíritu Santo habita dentro de nosotros para ayudarnos a crecer en la fe y vivir según los mandamientos de Dios. También nos ayuda a comprender mejor la Palabra de Dios y nos da fuerza para superar las pruebas y dificultades de la vida.
Testigos de Jesús
Hechos 1:8 también nos muestra que como creyentes estamos llamados a ser testigos de Jesús en todas partes. Debemos compartir nuestro testimonio con los demás y mostrarles el amor de Dios a través de nuestras acciones y palabras. En el momento en que recibimos el Espíritu Santo, se nos da la responsabilidad de ser testigos de Jesús. Esto no es una opción, sino un deber que tenemos como cristianos.
Dondequiera que estemos y hagamos lo que hagamos, debemos ser fieles a nuestro llamado a ser testigos de Jesús. A veces esto puede ser difícil y hay ocasiones en que nos sentimos intimidados o alienados. Pero este versículo nos recuerda que tenemos el poder del Espíritu Santo dentro de nosotros, dándonos la fuerza para compartir nuestra fe con los demás.