Interpretación de la Biblia / Hebreos 9:14
En Hebreos 9:14 el autor explica la superioridad del Nuevo Pacto y la eficacia del sacrificio de Cristo como Sumo Sacerdote perfecto.
Este versículo nos dice que la sangre de Cristo, quien se ofreció irreprensiblemente a Dios, puede limpiar nuestra conciencia de obras muertas para que podamos servir al Dios vivo. Pero ¿qué significa esto para nosotros hoy?
La necesidad de limpiar la conciencia
Para entender la importancia de limpiar nuestra conciencia, debemos entender qué son las obras muertas. Las obras muertas, en términos bíblicos, son aquellas acciones que nos llevan a la muerte espiritual y nos alejan de Dios.
La conciencia, a su vez, es la capacidad que tenemos de discernir entre el bien y el mal, y cuando cometemos acciones que van en contra de la voluntad de Dios, nuestra conciencia se ensucia y nos impide tener una relación íntima con Él.
Expiación por la sangre de Cristo
Pero a través de la sangre de Cristo tenemos acceso a la redención y podemos ser perdonados por nuestras obras muertas. Su sacrificio hizo posible que nuestras conciencias fueran limpiadas y tuviéramos una relación pura y verdadera con Dios.
Nuestra responsabilidad como cristianos
Sin embargo, no basta simplemente con que nuestra conciencia sea limpiada por la sangre de Cristo. También debemos cumplir con nuestra responsabilidad como cristianos de mantener nuestra conciencia libre de obras muertas. Esto significa que debemos esforzarnos por vivir según la voluntad de Dios, guardando Sus mandamientos y evitando caer en el pecado.